23 de diciembre de 2024 | 10:25

Actualidad

A la monarquía se le ve el plumero con la derechona de Feijóo

Laura Rangel Ybarra

23 de agosto de 2023 | 4:00 pm

Felipe VI: Intervención real en la política española

El rey Felipe VI, a lo largo de su reinado, ha ido incrementando su intervención en el escenario político. Esta actitud, lejos de ser meramente representativa como dicta la Constitución, tiene importantes repercusiones en el panorama democrático del país. Sus acciones, con una evidente inclinación hacia la derecha, cuestionan la verdadera neutralidad que un monarca debe mantener en una democracia parlamentaria.

Historia reciente de la monarquía

Desde la abdicación de Juan Carlos, Felipe VI ha buscado una mayor presencia activa en la esfera pública, más allá del papel estrictamente simbólico. El caso más reciente de su intromisión ha sido el encargo de formar gobierno a Alberto Núñez Feijóo, una decisión que ha generado controversias y cuestionamientos sobre la verdadera imparcialidad y papel constitucional de la Corona.

La Constitución versus las acciones reales

El diseño original de la Constitución de 1978 establece un monarca con un rol exclusivamente representativo. Sin embargo, en el caso de Felipe VI, se observa una tendencia a expandir su papel. La cuestión es: ¿está este enfoque más activo en línea con los valores democráticos, o es una amenaza para la democracia en España?

Las reacciones políticas ante la actuación del rey

A pesar de las claras intervenciones de Felipe VI, las fuerzas políticas parecen reticentes a confrontarlo abiertamente. Partidos como Vox muestran un apoyo incondicional, mientras que otros, a pesar de su descontento, evitan cuestionar directamente la autoridad del rey.

El rey Felipe VI recibe a Alberto Núñez Feijóo en la ronda de consultas para la propuesta de investidura.

Una monarquía democrática: ¿es posible?

Las democracias occidentales han coexistido con monarquías constitucionales. Sin embargo, para que esta relación funcione, el monarca debe ser un verdadero símbolo de unidad y abstenerse de intervenir en decisiones políticas. El desafío para España radica en asegurarse de que su monarca cumpla con estas condiciones, garantizando así la estabilidad y prosperidad de su sistema democrático.

El papel de Felipe VI en la política española plantea interrogantes fundamentales sobre el futuro de la democracia en el país. Es crucial que la sociedad y sus líderes políticos aborden estos cuestionamientos, garantizando que la monarquía y la democracia puedan coexistir armoniosamente en beneficio de todos los ciudadanos. La verdadera pregunta es: ¿puede España encontrar un equilibrio entre tradición y modernidad sin sacrificar sus valores democráticos?

Más noticias