Alerta sanitaria: el fango tras la DANA en Valencia y la proliferación bacteriana

Riesgos para los voluntarios: cómo protegerse en el fango contaminado

La acumulación de fango en las zonas afectadas por la DANA en Valencia ha planteado una alerta sanitaria debido a la posible proliferación de bacterias y otros patógenos en este tipo de terrenos húmedos y contaminados. Los voluntarios y el personal que participa en las labores de limpieza y rescate deben tomar precauciones extremas para evitar infecciones y enfermedades derivadas del contacto prolongado con el lodo, que puede estar contaminado por residuos urbanos, productos químicos y aguas negras.

La exposición a este tipo de fango puede conllevar riesgos para la salud, especialmente por la proliferación de bacterias como la Escherichia coli, la Salmonella y otros microorganismos presentes en aguas estancadas y suelos en descomposición. Para garantizar la seguridad de quienes colaboran en la zona, es esencial seguir rigurosamente las instrucciones de protección emitidas por las autoridades sanitarias y equipos de emergencia.

Medidas de protección personal: guantes, mascarillas y calzado adecuado

Para minimizar el riesgo de contagio o infección, se recomienda que los voluntarios y el personal en contacto con el fango adopten medidas de protección personal estrictas:

• Doble guante: Es fundamental utilizar dos capas de guantes, preferiblemente impermeables, para crear una barrera efectiva contra el contacto directo con el lodo contaminado. Esta protección doble reduce el riesgo de lesiones en las manos y minimiza la exposición a bacterias que podrían penetrar a través de pequeños cortes o abrasiones en la piel.
• Mascarillas: La utilización de mascarillas adecuadas es imprescindible, ya que los patógenos presentes en el lodo también pueden volverse aerosoles y afectar el sistema respiratorio. El uso de mascarillas de calidad, como las N95, ayuda a prevenir la inhalación de partículas contaminadas, especialmente en zonas de alta actividad donde el polvo y las partículas pueden dispersarse.
• Botas de agua: Es necesario llevar botas de agua impermeables y de caña alta, que permitan a los voluntarios moverse por terrenos fangosos sin que el lodo penetre. Además, las botas deben desinfectarse al final de cada jornada para evitar la acumulación de microorganismos.
• Uñas bien cortas: Mantener las uñas de manos y pies bien cortas reduce la acumulación de residuos y bacterias en áreas difíciles de desinfectar. Las uñas largas pueden ser un punto de entrada para patógenos que podrían comprometer la salud de los voluntarios, por lo que la higiene es crucial.
• Tapar heridas: Cualquier herida o corte, por pequeño que sea, debe cubrirse adecuadamente con apósitos impermeables para evitar que el fango o el agua contaminada entre en contacto con la piel abierta. Las heridas expuestas en contacto con este lodo son altamente vulnerables a infecciones bacterianas.

La importancia de seguir las indicaciones sanitarias en emergencias

Ante situaciones de riesgo sanitario como la que se vive actualmente en Valencia, es vital que los voluntarios y el personal de apoyo sigan las recomendaciones de las autoridades y de los equipos de emergencias. La proliferación bacteriana en el fango de áreas inundadas representa un riesgo real, y los efectos de una exposición sin protección pueden derivar en infecciones graves. La higiene, el uso adecuado del equipo de protección y la atención a cualquier síntoma de infección (como enrojecimiento, dolor o fiebre) son aspectos esenciales para cuidar la salud de quienes se encuentran colaborando en las labores de limpieza.