14 de noviembre de 2024 | 4:49

Actualidad

Bicicleta eléctrica sin batería: la nueva revolución en movilidad ya es realidad

Miguel Castillo

30 de octubre de 2023 | 7:23 am

Todos lo estábamos esperando, el mundo de las bicicletas eléctricas está a punto de ser testigo de una revolución. Adrien Lelièvre, un emprendedor francés y visionario en la industria, ha diseñado y patentado la Pi-Pop, una bicicleta eléctrica alimentada por un supercondensador en lugar de las tradicionales baterías de litio. Esta innovación no solo promete ser más sostenible, sino que también podría cambiar por completo cómo interactuamos y pensamos en el transporte personal.

La Tecnología Detrás de Pi-Pop

¿Por Qué un Supercondensador?

Un supercondensador almacena energía de una manera electrostática, a diferencia de las baterías de litio que la almacenan mediante una reacción química. Esto significa que un supercondensador puede almacenar y liberar energía de manera muy rápida cuando se necesita. En el caso de la Pi-Pop, esto se traduce en almacenar energía cuando la persona pedalea o frena y usarla para asistir en acciones más difíciles como reiniciar o subir cuestas. Lelièvre estima que la asistencia proporcionada por los supercondensadores de la bicicleta es suficiente para manejar una ganancia de elevación de 50 m si se carga en un terreno plano de antemano, lo que la hace adecuada para alrededor del 80 % de las ciudades europeas.

Un Símbolo de Sobriedad

Con un peso de 20 kg, la Pi-Pop es descrita por su creador como «un verdadero símbolo de sobriedad». «Siempre querer más, es decir, querer ir más rápido, añadir más energía… eso es un callejón sin salida», dijo Lelièvre. Al optar por un supercondensador en lugar de una batería de litio, la Pi-Pop también evita el uso de materiales de tierras raras, optando en cambio por materiales como el carbono, polímero conductor, láminas de aluminio y pulpa, para los cuales ya existen procesos de reciclaje.

Producción y Futuro

Hecho en Francia

La bicicleta, actualmente en su tercera generación de diseño, se ensambla en Orléans, Francia. «Creo que no podemos innovar si perdemos el control de la producción», afirmó Lelièvre, cuya carrera se construyó en la industria electrónica francesa. La empresa produce actualmente 100 bicicletas al mes y tiene como objetivo producir mil bicicletas mensuales para 2024.

Apuntando al Mercado Europeo

Lelièvre también tiene ambiciones europeas. «En 2025, queremos apuntar al mercado europeo, actualmente estamos discutiendo sobre una posible recaudación de fondos», dijo. Con la Unión Europea importando 1.2 millones de bicicletas eléctricas y 5.2 millones de bicicletas no eléctricas, según la agencia de datos de la UE, Eurostat, entrar en este mercado podría ser una enorme oportunidad para la empresa.

Conclusión

En resumen, la Pi-Pop no es solo una bicicleta eléctrica más en el mercado. Es un cambio de paradigma, un paso hacia un futuro más sostenible y consciente del impacto ambiental de nuestras elecciones de transporte. Al utilizar supercondensadores en lugar de baterías de litio, la Pi-Pop aborda directamente los problemas asociados con la minería de materiales raros y ofrece una alternativa más limpia y rápida. Es un recordatorio de que la innovación y la sostenibilidad pueden ir de la mano, y de que a veces, la solución más efectiva es también la más simple. Adrien Lelièvre y su equipo están liderando el camino, y el mundo está tomando nota.

Más noticias