Feijóo ¿ Un narcopresidente ?

Revelaciones y preguntas sobre la relación entre Feijóo y Marcial Dorado

En la madrugada del 5 de agosto de 1999, un trágico accidente automovilístico ocurrió en el kilómetro 68,5 de la AP-9, dejando como consecuencia una víctima mortal. Sin embargo, este suceso no está relacionado con una serie de narcotraficantes, sino que forma parte de un oscuro capítulo en la vida de Alberto Núñez Feijóo.

Las respuestas repetitivas del candidato

Contemplo con asombro cómo el candidato del Partido Popular, quien aspira a presidir el Gobierno, responde a las preguntas sobre su relación con el narcotraficante Marcial Dorado utilizando las mismas respuestas que ha dado a lo largo de los años. Es preocupante constatar que estas preguntas siguen sin respuesta clara hasta hoy. Es cierto que hasta hace poco, ningún medio había publicado nada sobre las famosas fotografías de Feijóo en el barco del narco. Afortunadamente, ahora incluso la prensa internacional ha comenzado a abordar esta controvertida amistad.

Las contradicciones en las declaraciones de Feijóo

Resulta sorprendente cómo, frente a la respuesta del señor Feijóo de que en aquel entonces no existía Google para investigar quién era Marcial Dorado, nadie ha cuestionado más a fondo. Aún más sorprendente es que, a pesar de toda la información publicada, nadie le ha dicho claramente: “Señor Feijóo, está mintiendo. Usted sabía quién era el narcotraficante Dorado por varias razones, y una de ellas, la más importante, es quién se lo presentó: Manolo Cruz“.

El papel de Manuel Cruz López

Manuel Cruz López es el gran protagonista de toda esta trama. Fue socio y testaferro de Dorado, además de chófer de altos cargos de la Xunta de Galicia, como Romay Beccaría, quien personalmente impulsó las carreras políticas de Rajoy y Feijóo. Manolo Cruz fue quien presentó a Feijóo y al narcotraficante Dorado, y su trágico final siempre ha estado rodeado de misterio.

Feijóo rara vez menciona a Cruz más allá de lo necesario. En una entrevista en el año 2020 con El Diario, menciona que conoce a Dorado a través de “un amigo” y que siempre estaban juntos cuando lo visitaban. También lo menciona en una rueda de prensa como presidente de la Xunta, afirmando que no había vuelto a ver a Marcial Dorado desde el entierro de Manolo Cruz en 1999. Sin embargo, esto claramente no es cierto, ya que existen grabaciones telefónicas ordenadas por el juez Taín, quien instruyó el caso contra Dorado, que datan desde 2001 hasta 2003, cuando Feijóo era presidente de Correos.

La amistad cuestionable

Incluso Marcial Dorado admitió ante Jordi Évole que llamó por teléfono a Feijóo en 2001 para quedar a comer y que se vieron. Por lo tanto, cuando Feijóo afirma desconocer las actividades de Marcial Dorado, está mintiendo. Manuel Cruz es la clave para entender todo este entramado. La relación entre Dorado y Feijóo no fue un encuentro ocasional fruto de un error de cálculo, sino una relación interesada que involucraba viajes pagados y contratos otorgados por la Xunta. Era una amistad de larga data con un individuo que toda Galicia sabía estaba relacionado con el contrabando y el tráfico de drogas.

Los vínculos de Manuel Cruz López

Vale la pena destacar los círculos en los que se movía Manuel Cruz López para comprender toda la historia. Era amigo de Arsenio Fernández de Mesa, se hizo militante del PP en Ferrol y trabajó como chófer de Romay Beccaría, el mecenas de Rajoy y Feijóo. La Consellería de Romay, con Fraga como presidente de la Xunta, contrataba el suministro de combustible para la calefacción de los hospitales y las ambulancias del Servizo Galego de Saúde (Sergas) con la empresa de gasolineras de Dorado, que también surtían de gasóleo a las planeadoras y camiones utilizados por el narco para transportar tabaco, hachís y cocaína.

En aquellos años, a principios de los 90, Manuel Cruz comenzó a visitar Vilagarcía y A Illa de Arousa, considerada la capital del narcotráfico gallego. Durante ese tiempo, Cruz llevaba una doble vida. Mientras frecuentaba la mansión de Dorado para hablar de “negocios”, también cumplía con sus obligaciones públicas como chófer del mentor de Feijóo, Romay Beccaría, y como miembro del PP en Ferrol, ciudad en la que residía.