Gobierno Sánchez aumenta subvención al seguro agrario hasta el 70% como respuesta a la sequía

El Gobierno de Pedro Sánchez, en un intento por aliviar las penurias de los agricultores y ganaderos afectados por la sequía, ha aprobado un Real Decreto-ley con medidas de urgencia. El anuncio ha despertado tanto esperanza como escepticismo entre los afectados y expertos del sector.

Subvención de seguros agrarios: el núcleo de las medidas de auxilio

Las medidas propuestas por el Gobierno incluyen la subvención de hasta el 70% del coste de las pólizas de seguros agrarios. Este apoyo se dirige especialmente a los cultivos que más han sufrido por la falta de lluvias y las altas temperaturas. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación aumentará la partida para subvencionar la contratación de seguros agrarios en 40,48 millones de euros.

Las pólizas subvencionadas deben incluir cobertura para el riesgo de sequía en cultivos de secano como los herbáceos extensivos, olivar, uva de vinificación, almendro, avellano, kiwi, endrino, alfalfa, remolacha azucarera y maíz forrajero.

Impacto económico de las medidas y respuesta del sector

Las ayudas directas aprobadas por el Consejo de Ministros ascienden a 636 millones de euros, lo que lleva el impacto económico total de las iniciativas a 784 millones de euros. Con esta ampliación, el apoyo a la contratación de seguros agrarios por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación alcanzará los 358 millones de euros en este ejercicio.

La medida ha sido bien recibida por algunos sectores, aunque ha habido críticas que argumentan que es insuficiente para cubrir el costo total de las pérdidas.

El seguro agrario como herramienta fundamental ante la sequía

El Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, destacó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que la partida destinada para subvencionar la contratación de seguros agrarios es «uno de los instrumentos fundamentales para responder a contingencias como la sequía».

Sin embargo, mientras estas medidas podrían aliviar algunas de las tensiones inmediatas, queda claro que la sequía y el cambio climático son desafíos a largo plazo que requieren una respuesta más amplia y duradera. El Gobierno de Sánchez, y de hecho todos los gobiernos, deberán seguir tomando medidas audaces y proactivas para asegurar la sostenibilidad de la agricultura en un mundo cada vez más caluroso y seco.