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Los «bancos en la sombra»: un riesgo latente para la estabilidad financiera global

Miguel Castillo

7 de abril de 2023 | 9:30 am

Los bancos en la sombra, entidades financieras no bancarias que operan fuera del sistema bancario tradicional, han experimentado un crecimiento preocupante en los últimos años

Su expansión plantea riesgos significativos para la estabilidad financiera mundial, como pérdidas crediticias y desajustes de liquidez.

Estas instituciones ofrecen servicios similares a los bancos tradicionales, como préstamos y gestión de activos, pero sin el mismo nivel de supervisión reguladora. El Consejo de Estabilidad Financiera (FSB) señala que en 2021, las entidades no bancarias representaban alrededor de $239 billones en activos, aproximadamente la mitad de los activos financieros totales del mundo.

Los «bancos en la sombra» pueden enfrentar problemas si sus prestatarios corporativos no cumplen con sus pagos, especialmente en un contexto económico debilitado. Además, algunos fondos abiertos, un tipo de entidad no bancaria, podrían tener dificultades de liquidez si los inversores deciden retirar su dinero rápidamente, ya que podrían no ser capaces de vender sus activos a la misma velocidad.

La falta de acceso a financiamiento de emergencia por parte de los bancos centrales y las herramientas limitadas de las autoridades públicas para mitigar riesgos de contagio también aumentan las preocupaciones. El riesgo de contagio podría extenderse a los bancos tradicionales a través de conexiones reales y percibidas, lo que podría desencadenar una crisis financiera más amplia.

Ante esta situación, la regulación de las entidades no bancarias se está volviendo cada vez más relevante. El Banco de Inglaterra anunció recientemente una prueba de resiliencia del sistema financiero británico que incluirá a las entidades no bancarias. Además, los organismos de vigilancia financiera de Estados Unidos y Europa están considerando la implementación del «swing pricing», un mecanismo que impondría un costo al retiro de efectivo de ciertos fondos para evitar la dilución del valor de las participaciones de otros inversores y desalentar las retiradas masivas de activos.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha instado a una supervisión más estricta de las entidades no bancarias, incluyendo normas sobre sus reservas de capital y acceso a la liquidez, para garantizar la estabilidad financiera mundial.

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