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María Guardiola la tercera vía: El PP moderno que España necesita

María José Gonzalez

21 de junio de 2023 | 10:12 am

Entre el nuevo Rajoy – Feijóo y la Ayuso de Aznar surge Maria Guardiola

El diálogo entre el Partido Popular (PP) y Vox en Extremadura ha llegado a un punto muerto. María Guardiola, candidata del PP en la región, ha anunciado la ruptura de las negociaciones con la formación de Santiago Abascal, abriendo el camino hacia una repetición electoral.

Acuerdo frustrado y acusaciones de «soberbia»

A pesar de los esfuerzos de última hora del PP por llegar a un acuerdo -ofreciendo a Vox la presidencia de la Asamblea de Extremadura, una secretaría de la Cámara y el puesto de senador por designación autonómica-, las conversaciones se han estancado. La formación de Abascal insiste en la necesidad de un Gobierno de coalición de derechas para garantizar el cumplimiento del acuerdo de investidura.

Vox se quedó sin representación en la Mesa de la Asamblea, lo que resultó en una mayoría de izquierdas compuesta por tres miembros del PSOE (incluida la presidenta), dos del PP y uno de Unidas por Extremadura (UPE). Guardiola no dudó en criticar duramente a Vox, acusándolo de «ansias de poder» y «soberbia». Aseguró que las propuestas de Vox son «obsoletas» y buscan «el aplauso fácil de los suyos».

Líneas rojas y negativa a «batallas culturales superadas»

Guardiola ha reiterado su compromiso de conformar un gobierno que deje fuera a los ultras, y ha criticado a Vox por buscar el «aplauso fácil de los suyos». Para la candidata del PP, Vox no está interesado en cambio, sino en reabrir «batallas culturales superadas». La candidata conservadora ha insistido en que su objetivo es ofrecer a Vox «un rol adecuado a sus resultados» en las negociaciones.

Negociación «teledirigida» desde Madrid

Guardiola también ha criticado la intervención de Jorge Buxadé, número dos de Vox, quien viajó a Mérida para asistir a la constitución de la Asamblea. Según Guardiola, la presencia de Buxadé evidencia que las negociaciones de Vox estaban «teledirigidas» desde Madrid. Asegura que Extremadura es ignorada por la cúpula del partido ultra y que Buxadé se presentó para dictar a los extremeños qué hacer.

Vox mantiene la «mano tendida»

A pesar de la actitud crítica del PP, Vox ha reiterado su disposición para intentar un acuerdo de investidura. Han responsabilizado al partido de Guardiola de la falta de consenso que ha llevado a la Presidencia de la Cámara regional a caer en manos de la socialista Blanca Martín. Aseguran que son «imprescindibles» para construir una alternativa a la izquierda y afirman que no aceptarán «regalos ni chantajes».

La situación política en Extremadura es volátil y incierta. Con el PP y Vox en desacuerdo, y la posibilidad de nuevas elecciones en el horizonte, los próximos pasos de estas formaciones podrían determinar el futuro político de la región.

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