Putin advierte sobre posibles represalias si Ucrania utiliza misiles de largo alcance contra Rusia

El Kremlin alerta que un ataque directo a su territorio con armamento occidental implicaría la participación activa de la OTAN

El presidente ruso, Vladímir Putin, ha lanzado una advertencia contundente sobre el uso de misiles de largo alcance por parte de Ucrania contra territorio ruso. Según el Kremlin, si estos misiles, que podrían provenir de Estados Unidos o Reino Unido, alcanzan objetivos en Rusia, las consecuencias podrían ser devastadoras y significarían, según Putin, una guerra abierta con la OTAN.

Rusia ha insistido en que Ucrania no tiene la capacidad por sí sola de llevar a cabo ataques de esta magnitud sin la ayuda de inteligencia proporcionada por satélites occidentales, lo que implicaría la participación activa de estos países en la planificación de los ataques. Putin ha subrayado repetidamente que una agresión de este tipo podría desatar una respuesta de Rusia que llevaría el conflicto a un nivel mucho más peligroso.

EE.UU. y Reino Unido en el centro del conflicto

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha mostrado cautela ante la solicitud de Ucrania de suministrarle misiles de largo alcance, y hasta ahora, ha pospuesto la decisión definitiva. Mientras tanto, el Kremlin ha dejado claro que si estos misiles son utilizados, será visto como una intervención directa de los países occidentales en el conflicto, lo que convertiría a la OTAN en un actor activo en la guerra. El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha advertido que las líneas rojas establecidas por Moscú no deben tomarse a la ligera, advirtiendo que la estabilidad estratégica se vería comprometida.

En varias ocasiones, Rusia ha trazado diferentes «líneas rojas» en el conflicto, como los ataques a Crimea, las incursiones en sus fronteras y los bombardeos en zonas estratégicas como Moscú y San Petersburgo. A pesar de la violación de estas advertencias, hasta ahora, la respuesta de Putin ha sido más moderada de lo que muchos esperaban. Sin embargo, Rusia ha intensificado los bombardeos y los ataques contra infraestructuras clave de Ucrania como parte de su respuesta militar.

El fantasma de una escalada nuclear

La amenaza nuclear ha sido una constante en la retórica rusa desde el inicio del conflicto. Figuras clave dentro del Kremlin, como Dmitri Medvédev, han señalado que Rusia podría estar dispuesta a utilizar armas nucleares tácticas si las condiciones lo justifican, sobre todo en regiones fronterizas como Kursk, que han sufrido incursiones ucranianas. Incluso se ha mencionado la posibilidad de recurrir a armamento de nueva generación, como misiles hipersónicos, en caso de una escalada extrema del conflicto.

Los halcones dentro del gobierno ruso parecen prepararse para lo peor. Mientras tanto, las tensiones entre Moscú y Occidente continúan aumentando, con la OTAN y Estados Unidos tratando de evitar que el conflicto escale a un enfrentamiento directo, aunque las advertencias de Rusia son cada vez más claras y contundentes.