Raffaella Carrá: las amantes del rey Juan Carlos I

La súper estrella italiana entre los nombres que salen a la luz como romance del monarca

La caja de Pandora está abierta, y más nombres salen a la luz sobre las amantes de juventud del entonces rey Juan Carlos I. Entre ellas, figura la súper estrella italiana Raffaella Carrá, fallecida en 2021 a los 78 años, según ha publicado la periodista Pilar Eyre en Lecturas. Este destape se suma al revuelo que generaron recientemente las fotos de Bárbara Rey junto a don Juan Carlos, en las que aparecían disfrutando de una comida, un beso y conversaciones privadas reveladas en audios que recuerdan a interrogatorios de la artista murciana al exmonarca.

Una vida amorosa más libre tras la muerte de Franco

El punto de inflexión en la vida amorosa de Juan Carlos I ocurrió tras la muerte de Franco en 1975. Según Eyre, el rey «se sintió más libre» a partir de entonces. Adoptó un estilo más moderno, cambió su vestimenta, se depiló el entrecejo y comenzó a tomar rayos UVA. Con el nacimiento de don Felipe VI en 1968, el matrimonio real se distanció, y doña Sofía llegó a sorprender a su marido en una salida privada de caza en los Montes de Toledo, donde lo encontró con otra mujer. Ese evento motivó a la reina Sofía a considerar la separación, refugiándose con sus hijos en la India y buscando consuelo en su madre, Federica de Hannover, quien la convenció de regresar.

Los romances del rey: Bárbara Rey y más

El romance entre Juan Carlos I y Bárbara Rey fue «intermitente» y se extendió por 18 años, aunque el monarca simultaneaba otras relaciones. Entre ellas, su relación más estable, la que mantiene con Marta Gayá, continúa hasta el día de hoy, según Eyre, aunque se presupone que solo en calidad de amistad. Eyre también revela que el rey solía recurrir a una Madame madrileña para conocer a «famosas» que le atraían.

Raffaella Carrá y su relación con el rey

En medio de esta lista de romances, aparece Raffaella Carrá. La cantante y bailarina italiana, conocida por su energía y popularidad en toda Europa, tuvo una conexión especial con el rey. Eyre cuenta que, durante un discurso de Navidad televisado, Juan Carlos I apareció con una corbata amarilla de la marca Hermés, y Carrá confesó a una amiga que fue ella quien se la había regalado.

El romance entre ambos solía desarrollarse en un restaurante italiano en Madrid, según la escritora, y los encuentros continuaban en un apartamento cercano, gestionado por los servicios secretos.

Corinna Larsen: el gran amor

El relato de Pilar Eyre se extiende hasta nombres conocidos como Lady Di, con quien el monarca intentó entablar relación durante una visita a Mallorca. Entre las muchas mujeres que formaron parte de la vida amorosa de Juan Carlos I, su gran amor, según Eyre, fue Corinna Larsen, cuyo nombre ha estado en el centro de la polémica en los últimos años.