22 de noviembre de 2024 | 12:40

Bilbao

La Casa de la Misericordia de Bilbao celebra su 250 aniversario

Mairenis Gómez

3 de octubre de 2024 | 11:32 am

Dos siglos y medio al servicio de los más necesitados de la ciudad

Este año, la Casa de Misericordia de Bilbao conmemora su 250 aniversario, marcando una larga trayectoria de servicio a la comunidad. Fundada en 1774, esta institución ha sido testigo de los cambios sociales a lo largo de los siglos, adaptándose a las nuevas demandas de la sociedad. Inicialmente, la Casa de Misericordia se dedicaba a la atención de niños y niñas como orfanato. Sin embargo, en 1989, su enfoque cambió por completo para centrarse exclusivamente en el cuidado de personas mayores. Actualmente, el centro tiene una capacidad de 237 plazas distribuidas en cinco unidades de atención.

A lo largo de su historia, la institución ha cambiado de ubicación varias veces, siendo su actual emplazamiento en la Avenida de Sabino Arana el más emblemático. Sus jardines, que abarcan más de 16.600 m², ofrecen un espacio de tranquilidad en pleno centro de Bilbao. A pesar de su rica historia, la Casa de Misericordia sigue mirando hacia el futuro, con nuevos proyectos para mejorar la calidad de vida de sus residentes.

Nuevas iniciativas y colaboración social

El centro tiene la intención de aumentar el número de unidades convivenciales de menor tamaño, siguiendo el modelo que ya se ha implementado con éxito. Actualmente, cuenta con dos unidades, como la Unidad Carola, que alberga a 14 residentes. Según Julia Graña, coordinadora asistencial, «los residentes viven en un ambiente cálido y hogareño, formando entre todos una gran familia.»

Además, la institución sigue abierta a colaborar con otras entidades para abordar las nuevas necesidades sociales que surgen en la comunidad. Según Sofía Delgado, directora de la Casa de Misericordia, «nuestro departamento psicosocial está en contacto con el área de acción social del Ayuntamiento de Bilbao, centros de voluntariado y fundaciones. Estamos siempre pendientes de las necesidades sociales que puedan complementar los servicios actuales.»

Este compromiso con la innovación y la colaboración refleja la voluntad de la Casa de Misericordia de seguir siendo una institución fundamental para Bilbao, adaptándose a los tiempos sin perder su esencia.

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