Venezuela acusa a dos bilbaínos de planear un atentado contra Maduro

Detenidos junto a ciudadanos estadounidenses y un checo en una operación contra el Gobierno venezolano

El Gobierno de Venezuela ha detenido a dos ciudadanos españoles, Andrés Martínez Adasme y José María Basoa Valdovinos, ambos de Bilbao, bajo la acusación de estar implicados en una supuesta operación terrorista para asesinar al presidente Nicolás Maduro y a la vicepresidenta Delcy Rodríguez. Según el ministro del Interior venezolano, Diosdado Cabello, estos dos individuos formaban parte de un grupo internacional, coordinado por Estados Unidos, con el objetivo de desestabilizar al país sudamericano.

La operación también involucraba a dos estadounidenses y un ciudadano checo, y según Cabello, España habría suministrado mercenarios para la ejecución del plan, apoyando la acción orquestada por la CIA. Las autoridades venezolanas sostienen que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) español estaba involucrado en el reclutamiento de mercenarios de origen francés cuya misión era tomar el control del Aeropuerto Internacional de Maiquetía, que sirve a Caracas.

Estados Unidos desmiente cualquier complot contra Maduro

Por su parte, el Departamento de Estado de Estados Unidos ha confirmado la detención de al menos un ciudadano estadounidense en Venezuela, aunque ha rechazado categóricamente cualquier implicación en un complot para derrocar a Maduro. «Es completamente falso», señalaron desde el departamento, enfatizando que la política de Estados Unidos hacia Venezuela sigue centrada en apoyar una solución democrática a la crisis política del país.

Las tensiones entre Caracas y Washington no son nuevas, pero esta acusación ha vuelto a elevar el tono diplomático entre ambas naciones. Mientras tanto, el Gobierno español también ha negado cualquier relación con el supuesto complot, afirmando que los ciudadanos españoles detenidos no tienen vínculos con el CNI, a pesar de las declaraciones insistentes de Cabello.

Armas incautadas y tensiones diplomáticas en aumento

Durante la operación, Venezuela incautó más de 400 armas, según informó el ministro Cabello. Afirmó que los detenidos pretendían traer al país un grupo de mercenarios para llevar a cabo un atentado contra Maduro y otros dirigentes del chavismo. A pesar de la gravedad de las acusaciones, el Gobierno español, a través de su ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha intentado rebajar la tensión diplomática tras las recientes declaraciones de la ministra de Defensa, Margarita Robles, que calificó al régimen venezolano de «dictadura».

La situación se ha complicado aún más esta semana, tras la concesión de asilo político en España al opositor venezolano Edmundo González, quien fue recibido por el presidente Pedro Sánchez. Este gesto simbólico ha generado más fricciones entre los gobiernos de ambos países, con el presidente del Parlamento venezolano pidiendo a Maduro romper las relaciones con España.

La denuncia de las familias y la incertidumbre sobre los detenidos

Las familias de Andrés Martínez Adasme y José María Basoa Valdovinos, preocupadas por la falta de noticias, denunciaron su desaparición ante la Ertzaintza después de no poder contactarlos durante varios días. La policía vasca realizó las investigaciones pertinentes y confirmó que ambos habían sido detenidos en Venezuela. No se ha ofrecido más información sobre las condiciones de su arresto ni los detalles específicos que los vinculan con la presunta operación terrorista.

Este incidente se suma a una larga lista de tensiones entre Venezuela y varios países occidentales, y pone a España en una posición diplomática complicada. Mientras tanto, las familias de los detenidos esperan más información sobre su situación y las posibles implicaciones legales que podrían enfrentar en Venezuela.

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