Euskadi testigo de una era de estabilidad en los precios de la vivienda

Euskadi se posiciona en un punto de inflexión con una leve alza en el precio de la vivienda y un aumento sostenido en el alquiler

Vivimos en una época donde el equilibrio parece ser una utopía, especialmente cuando hablamos de economía y mercado inmobiliario. Sin embargo, Euskadi parece desafiar esta norma con una estabilidad en los precios de la vivienda que llama la atención no solo a nivel regional sino nacional. En este contexto, el primer trimestre del año 2024 ha sido revelador. Mientras que el precio de la vivienda se ha contenido, registrando un crecimiento marginal del 0,1%, el sector del alquiler ha experimentado un aumento del 4,2%. Esta dinámica ofrece una perspectiva única sobre las tendencias del mercado inmobiliario en la región.

La moderación en el precio de la vivienda en Euskadi contrasta con el panorama nacional, donde otras comunidades han visto incrementos significativos. Con un costo medio por metro cuadrado de 2.368 euros, Euskadi se mantiene como una de las comunidades más caras, aunque muestra una tendencia hacia la estabilización. Este fenómeno no es uniforme a lo largo de sus territorios: mientras Araba experimenta un leve incremento, Gipuzkoa y Bizkaia presentan descensos, lo que podría indicar una redistribución del interés por parte de compradores y vendedores.

La dualidad del mercado inmobiliario en Euskadi: una mirada al primer trimestre de 2024

El mercado del alquiler, por otro lado, sigue una trayectoria ascendente, con precios que continúan elevándose. Este aumento es particularmente notable en Gipuzkoa, seguido por Bizkaia y Araba. La demanda creciente por opciones de alquiler, potenciada por un descenso en las compraventas de vivienda, presiona al alza los precios, configurando un escenario de mayor tensión para aquellos que buscan soluciones habitacionales accesibles.

El análisis del mercado inmobiliario no estaría completo sin considerar el contexto económico general. El incremento en los procedimientos concursales en el primer trimestre del año, un 58% más respecto al periodo homólogo de 2023, es un indicador de las turbulencias que enfrentan ciertos sectores. Este aumento en los concursos y procedimientos especiales para microempresas resalta las dificultades, pero también los cambios estructurales en el tejido empresarial.

El sector del comercio, seguido por la construcción y actividades inmobiliarias, lidera tanto en procedimientos concursales como en disoluciones, reflejando la vulnerabilidad de estas áreas frente a los desafíos económicos actuales. Estos movimientos tienen, sin duda, un efecto en el mercado inmobiliario, impactando tanto la oferta como la demanda de espacios comerciales y residenciales.

Reflexiones finales: mirando hacia el futuro

La estabilidad de los precios de la vivienda en Euskadi, en contraste con el dinámico mercado de alquiler, ofrece una imagen de equilibrio en medio de la incertidumbre. Mientras nos adentramos más en el año 2024, será crucial observar cómo estas tendencias evolucionan y qué medidas se pueden adoptar para asegurar que el acceso a la vivienda, ya sea en propiedad o alquiler, permanezca al alcance de todos.

Esta dualidad del mercado inmobiliario, junto con los retos económicos más amplios, nos invita a reflexionar sobre la resiliencia de nuestra comunidad y la capacidad para adaptarnos a los cambios. A medida que Euskadi se mueve a través de esta era de estabilidad en los precios de vivienda, queda claro que nuestro enfoque debe estar centrado en la sostenibilidad a largo plazo y en garantizar que el crecimiento económico beneficie a todos los sectores de la sociedad.