25 de diciembre de 2024 | 3:15

Actualidad

Policía del 1-O denuncia delito de agresión sexual seis años después

Un agente policial del 1-O denuncia un delito de agresión sexual seis años después del incidente, aportando pruebas gráficas

Jeickson Sulbaran

12 de septiembre de 2023 | 5:30 pm

El Caso Señala la Comunicación Tardía de Delitos Contra la Libertad Sexual en el Contexto Político

Seis años después de los acontecimientos del 1 de octubre de 2017, el foco vuelve a caer sobre un agente de la Policía Nacional imputado en aquel entonces. Pero esta vez, el agente no es el acusado, sino quien denuncia una agresión sexual. El lunes 11 de septiembre, el Juzgado de Instrucción número 7 de Barcelona recibió la denuncia del agente contra una manifestante separatista por un delito «contra la libertad sexual«.

Nuevas Pruebas Resurgen Años Después

Después de años en la búsqueda de evidencia gráfica que pudiera respaldar su versión de los hechos, el agente y sus abogados han obtenido finalmente un vídeo que muestra la agresión. El documento visual, grabado por la cadena qatarí Al Jazeera, muestra a una mujer agarrando la cabeza del agente y plantándole un beso en la boca de manera no consentida.

Contexto de la Agresión

El incidente tuvo lugar frente a los Servicios Centrales del Departamento de Enseñanza, que servía como colegio electoral ese día. Según el relato del agente, la mujer le agarró de la cabeza y «sin mediar palabra, pero mirándole a los ojos, le propinó un beso en la boca de forma sorpresiva, inopinada, repentina y no consentida».

Dilemas Éticos y Repercusiones Legales

Este caso abre la discusión sobre la objetividad de la justicia y la legitimidad de las denuncias presentadas años después del incidente inicial. Además, plantea preguntas serias sobre cómo se manejan las situaciones delicadas en un contexto de alta tensión política.

Inquietud entre las Fuerzas de Seguridad

El Sindicato Unificado de la Policía (SUP) ha instado a que se pongan a disposición del agente todas las herramientas y garantías del Estado de derecho para «proteger a este agente y que todo el peso de la ley recaiga sobre esta persona». Esto resalta el ambiente de tensión y violencia en el que los agentes a menudo se encuentran, donde no solo son sujetos de imputaciones, sino también víctimas de diversos delitos, incluidas agresiones sexuales.

A La Espera de una Resolución

El agente sigue encausado en el procedimiento del 1-O, junto con otros 44 compañeros de la Policía Nacional. Pero con esta nueva denuncia y la evidencia aportada, es probable que el curso de los acontecimientos tome una dirección diferente. De seguir adelante, el caso podría servir como un precedente significativo en el tratamiento judicial de agresiones sexuales en circunstancias políticas altamente cargadas.

Este caso no solo demuestra la complejidad de los delitos sexuales, sino también cómo estos pueden ser influenciados y complicados aún más por un contexto político y social turbulento. La búsqueda de justicia es un camino largo y sinuoso, pero en casos como este, se hace aún más imprescindible hacerlo de manera rigurosa y justa.

Más noticias