Repsol gana a Iberdrola por publicidad engañosa

Autocontrol respalda a Repsol frente a Iberdrola

La noticia de que el Jurado de Autocontrol ha rechazado una reclamación presentada por Iberdrola contra Repsol marca un punto importante en el ámbito de la regulación de la publicidad en España. El 19 de enero, Iberdrola Clientes formuló una queja sobre una campaña publicitaria de Repsol que promocionaba sus nuevos combustibles renovables, alegando que la publicidad podría inducir a error a los consumidores al sugerir que todos los productos de Repsol son ahora 100% renovables. La disputa giró en torno al cumplimiento de la norma 14 del Código de Conducta Publicitaria de Autocontrol que exige veracidad en las afirmaciones publicitarias.

Autocontrol, encargado de supervisar la adecuación de las prácticas publicitarias a los estándares éticos y legales, concluyó que los materiales promocionales de Repsol no contravenían dicho código. La publicidad en cuestión destacaba que los nuevos combustibles de Repsol son 100% renovables, provenientes de residuos orgánicos y ya disponibles en más de 50 estaciones de servicio, con planes de expansión a 600 para finales de año. Según Repsol, esta afirmación se basa en estudios que confirman la procedencia renovable de estos combustibles y que estos son adecuados para su uso en vehículos convencionales, sin causar confusiones sobre la totalidad de su oferta de combustibles.

La resolución del jurado enfatizó que la publicidad de Repsol no lleva a creer que toda su gama de combustibles sea renovable actualmente, considerando poco probable que los consumidores interpretaran la campaña de esa manera. Además, el jurado apuntó que Iberdrola no pudo presentar pruebas suficientes para demostrar la falta de veracidad en las afirmaciones de Repsol sobre el carácter renovable de sus combustibles. Este fallo no solo clarifica los límites de la publicidad respecto a la sostenibilidad, sino que también destaca la necesidad de basar las acusaciones en evidencias sólidas y verificables.

El camino hacia una publicidad más transparente

Este caso entre Iberdrola y Repsol subraya la importancia de una publicidad transparente y basada en la realidad, especialmente en sectores de alta sensibilidad como el energético, donde la precisión de la información puede impactar significativamente en las decisiones de los consumidores. La decisión de Autocontrol refuerza el marco que las empresas deben seguir para asegurar que sus comunicaciones comerciales no solo sean creativas, sino también honestas y responsables.

Para los consumidores, este resultado es un recordatorio crítico de la necesidad de revisar críticamente las afirmaciones publicitarias, especialmente aquellas relacionadas con credenciales ambientales, que son de particular interés público y relevancia. Para las empresas, ofrece una lección sobre la importancia de fundamentar sus campañas en datos objetivos y estudios fiables para evitar conflictos legales y daños a su credibilidad.

El fallo de Autocontrol en el caso de Iberdrola contra Repsol no solo resuelve una disputa particular, sino que también contribuye al debate más amplio sobre la ética en la publicidad y el papel de la autorregulación en la promoción de prácticas comerciales leales y transparentes. Este tipo de decisiones son vitales para mantener la confianza del consumidor y fomentar un mercado más justo y sostenible.