El primo juerguista de Felipe VI vetado por Letizia

Los primos y amigos inseparables disfrutaron de su juventud en Estados Unidos, pero sus caminos se separaron tras sus matrimonios

Felipe VI y Pablo de Grecia compartieron una amistad cercana desde la infancia, fortalecida durante su época universitaria en Washington, donde ambos estudiaron en la Universidad de Georgetown. Allí, por primera vez, pudieron experimentar la vida como jóvenes comunes, lejos de las cámaras y las presiones familiares.

La vida en Washington

Durante sus años en Georgetown, los primos disfrutaron de numerosas fiestas y actividades juntos. En esa época, Felipe VI, tímido por naturaleza, conoció a Gigi Howard, su primer amor, mientras que Pablo de Grecia comenzó a salir con Marie-Chantal Miller, con quien más tarde se casaría.

Los primos llevaban una vida universitaria común, con salidas a bares y paseos en bicicleta. Según Marie, Pablo era estudioso y responsable, mientras que Felipe VI solía ser más juerguista. A pesar de sus diferencias, su amistad se mantuvo sólida.

Casamientos y cambios en la relación

Después de terminar sus estudios, Pablo y Marie se casaron en 1995. Años más tarde, cuando Letizia se unió a la familia real española al casarse con Felipe VI, la relación entre los primos comenzó a distanciarse. Aunque Letizia y Marie-Chantal Miller solían llevarse bien, los encuentros entre los primos se volvieron cada vez menos frecuentes.

La influencia de sus esposas en la amistad

Las esposas de Felipe VI y Pablo de Grecia parecen haber influido en la relación entre los primos. Aunque ambos han sido educados con los mismos principios y valores, sus responsabilidades como maridos y padres han limitado el tiempo que pueden pasar juntos.

La relación entre Letizia y Marie-Chantal Miller se deterioró tras un incidente en la catedral de Palma de Mallorca. Desde entonces, Pablo de Grecia no ha sido visto en Zarzuela y los encuentros entre los primos han tenido lugar fuera de España.

A pesar de la distancia y las tensiones entre sus esposas, Felipe VI y Pablo de Grecia siguen compartiendo recuerdos y valores. Cuando se encuentran, es como si el tiempo no hubiera pasado. La amistad entre los primos, aunque afectada por las circunstancias, sigue siendo un vínculo especial en sus vidas.