20 de mayo de 2024 | 10:06

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El nuevo ministro principal de Escocia apunta a la independencia en 5 años

María José Gonzalez

10 de mayo de 2024 | 5:37 pm

John Swinney, el nuevo ministro principal de Escocia, ha sido claro en su objetivo: la independencia. En los discursos que ha dado tras asumir el cargo en sustitución del dimitido Humza Yousaf, Swinney ha subrayado que la independencia seguirá siendo una prioridad para el Partido Nacional Escocés (SNP). En una entrevista reciente con Sky News, sostuvo que la independencia de Escocia podría lograrse en un plazo de cinco años debido a que los argumentos son «convincentes».

La independencia como respuesta a los desafíos de Escocia según John Swinney

En su análisis, Swinney ha identificado dos factores estratégicos que están influyendo en la vida de los escoceses: el costo de vida en aumento y las «implicaciones» del Brexit, que afectan negativamente a la economía y sociedad del país. Swinney ha culpado a las «malas decisiones tomadas en Westminster», señalando que los escoceses votaron mayoritariamente para quedarse en la Unión Europea durante el referéndum de 2016, una decisión que fue posteriormente ignorada.

El nuevo ministro principal subrayó que el SNP debe trabajar para obtener un mayor apoyo a favor de la independencia. Sin embargo, los laboristas buscan desafiar al SNP en las próximas elecciones, programadas para 2026, lo que podría poner en riesgo la posición del partido independentista. Pese a esto, Swinney sostiene que la independencia es la «respuesta» a estos problemas que enfrenta Escocia.

La posición frente al gobierno central y la visión de Swinney sobre el Partido Laborista

Swinney también evitó cualquier apoyo o alianza con el Partido Laborista, anticipando que incluso si los laboristas llegaran al poder en el gobierno británico, no cambiarían las políticas clave que afectan a Escocia. No ve un «giro dramático» en temas como los recortes del gasto público, los cuales, según él, han causado un «enorme daño».

Además, Swinney es consciente de que cualquier consulta vinculante sobre la independencia depende de la aprobación del gobierno central, el cual ha dejado claro que no tiene intención de permitirlo. Sin embargo, con el décimo aniversario del referéndum de 2014 acercándose, es probable que el debate sobre la independencia cobre fuerza, ya que el SNP busca convertirlo en una oportunidad para fortalecer su apoyo.

En resumen, Swinney parece decidido a mantener la independencia en el centro de la agenda política escocesa, a pesar de los desafíos planteados por Westminster y los laboristas. Su mensaje es claro: la independencia es el camino para asegurar el futuro de Escocia frente a los desafíos económicos y políticos actuales.

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