Bilbao sale del Top 10 de ciudades más pobladas: ¿Qué ha cambiado en la capital vizcaína?

Cambio en el ranking de población

La ciudad de Alicante se ha convertido en una de las diez ciudades más pobladas de España con 348.901 habitantes a fecha de 1 de enero de 2023, superando a Bilbao, que desde ahora queda relegada a la undécima posición. Así se desprende de los datos actualizados del Instituto Nacional de Estadística (INE) y del Instituto Vasco de Estadística (Eustat).

Alicante en crecimiento

Alicante ha experimentado un crecimiento demográfico en los últimos años, pasando de 329.988 habitantes en 2017 a 348.901 en 2023. Este incremento ha llevado a la ciudad alicantina a escalar posiciones en el listado de ciudades más habitadas de España, dejando atrás a Bilbao, que cuenta con 340.455 personas empadronadas según datos del Eustat referidos al año 2022.

El alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha manifestado que «el crecimiento demográfico demuestra que la ciudad va para arriba» y que seguirán trabajando en la transformación física y del tejido productivo de Alicante para reforzar su atractivo y consolidarse en el Top 10 de las principales ciudades españolas.

Bilbao: una tendencia contraria

Por su parte, Bilbao ha experimentado una tendencia contraria en cuanto a su población. La cifra de 340.455 habitantes en 2022 es la más baja registrada en los últimos cinco años. En 2021, la ciudad contaba con 342.662 habitantes; en 2020, 346.478; en 2019, 343.430; y en 2018, 342.810.

Reflexión sobre el futuro de Bilbao

El descenso en la población de Bilbao plantea interrogantes sobre el futuro de la capital vasca y las posibles razones detrás de esta tendencia. ¿Se deben estos cambios a la migración de ciudadanos hacia otras ciudades con mayores oportunidades laborales o a un envejecimiento de la población que no se compensa con nuevos nacimientos?

Es importante que las autoridades locales analicen estos datos y trabajen en políticas y estrategias para revertir la situación, ya sea atrayendo a nuevos habitantes, fomentando la natalidad o impulsando el desarrollo económico y social de la ciudad.

El caso de Bilbao y Alicante es un ejemplo de cómo las dinámicas demográficas pueden cambiar y afectar el panorama urbano en España. El desafío para las ciudades es adaptarse a estas transformaciones y garantizar un entorno próspero y sostenible para sus habitantes.