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Bizkaia

Lanbide y la nueva ley de empleo cambia hacia la personalización

Reforzando la integridad de la RGI: Lanbide implementa nueva unidad de inspección

María José Gonzalez

7 de enero de 2024 | 1:00 pm

La reciente aprobación de la nueva ley de empleo por el Parlamento Vasco marca un hito importante en la gestión del empleo en la región

El texto, que redefine las políticas activas de inserción laboral, coloca a Lanbide, el servicio público vasco de empleo, como el eje central de la nueva Red Vasca de Empleo. Esta red integrará a ayuntamientos, diputaciones, agentes sociales y económicos, centros de formación y el tercer sector, en un esfuerzo conjunto para unificar ofertas y cursos de empleo.

Nuevas fórmulas para la búsqueda de empleo

La nueva ley busca ofrecer un «diagnóstico personalizado» a cada trabajador en su proceso de búsqueda de empleo. Alfonso Gurpegui, viceconsejero del Departamento vasco de Trabajo, explica que el objetivo es «ordenar» el ámbito del empleo, en el que operan unos 300 agentes vascos, a través de una red que los agrupe y comparta oportunidades laborales en una plataforma común. Este enfoque busca satisfacer las demandas de los trabajadores con un acompañamiento integral, incluyendo orientación laboral y acceso a formación necesaria.

La ley vasca se diferencia de la legislación estatal en su naturaleza jurídica, adoptando el derecho subjetivo, lo que implica que los servicios prometidos son exigibles y recurribles ante los tribunales de justicia. Gurpegui destaca que, a diferencia de la ley española que habla de un «derecho garantizado», en Euskadi se han establecido plazos exigentes para la prestación del servicio.

El conocimiento detallado del itinerario laboral del demandante de empleo es clave en esta estrategia. Se busca individualizar las actuaciones relacionadas con la empleabilidad, considerando las circunstancias únicas de cada trabajador. Esto puede incluir enfoques integrales basados en la formación, así como la colaboración con el sistema de salud o educación de base, en casos de discapacidad o déficits educativos.

«Lanbide tendrá un papel central en las políticas activas de empleo junto al resto de agentes», afirma Gurpegui. Los ayuntamientos también jugarán un rol importante, especialmente aquellos de municipios con más de 10.000 habitantes, que estarán obligados a disponer de planes de empleo y desarrollo local. Estos planes formarán parte del diseño de la Estrategia Vasca de Empleo 2030, que busca lograr un «empleo de calidad e inclusivo» y que contribuya a la competitividad de la economía.

La gobernanza y el futuro de las políticas de empleo

La gobernanza de las políticas públicas de empleo será responsabilidad del Gobierno vasco y del nuevo Consejo Vasco de Políticas Públicas de Empleo, así como de la Mesa de Diálogo Social. Este foro incluye al Gobierno (Lakua), la patronal Confebask y los sindicatos UGT y CC.OO. La ley también tiene en cuenta la necesidad de responder a la carencia de perfiles especializados en el mercado laboral.

La implementación de los distintos ejes de la reforma será progresiva. Para junio, deben estar listos los planes de empleo, y en los doce meses siguientes, todos los demandantes de empleo contarán con un diagnóstico individual. A partir del 1 de enero de 2025, Lanbide empezará a operar como ente público de derecho privado, preparándose para desarrollar un modelo que responda a los retos del mercado de trabajo.

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