Tensión en aumento entre las dos facciones de la familia real española

El próximo capítulo con la visita del Emérito a Sanxenxo promete ser de aupa

La relación entre la Familia Real A, compuesta por Felipe y Letizia, y la Familia Real B, encabezada por Juan Carlos, sigue deteriorándose, generando una creciente división y conflictos públicos.

La tensión entre las dos ramas de la Familia Real española se ha intensificado en los últimos tiempos. Por un lado, tenemos a Felipe y Letizia, quienes han establecido un cordón sanitario alrededor de Juan Carlos y sus allegados. Por otro lado, está el propio Juan Carlos, acompañado de Elena, Cristina, y sus respectivos hijos, como Froilán e Irene Urdangarín.

La ruptura entre ambas facciones de la Familia Real ha generado una serie de enfrentamientos públicos que resultan difíciles de ocultar. Un ejemplo reciente es la fotografía publicada en Semana Santa, donde aparecen Juan Carlos, Elena y Froilán juntos. Esta imagen ha sido interpretada como una provocación, especialmente porque fue publicada el mismo día en que la princesa Leonor regresó a España.

La desafiante actitud de Juan Carlos y sus descendientes

Juan Carlos, a pesar de su edad y las circunstancias que lo rodean, mantiene una actitud desafiante hacia su hijo Felipe y su nuera Letizia. Esta actitud ha sido adoptada por algunos de sus descendientes, en particular la rama formada por Elena, Froilán y Victoria Federica.

El «trío calavera», como se les conoce, parece estar en conflicto permanente con los actuales reyes. Mientras Felipe y Letizia consideran que la influencia de Juan Carlos y sus seguidores es negativa, estos últimos rechazan la forma en que el emérito ha sido tratado por sus sucesores en el trono.

Elena, la aliada más fiel de Juan Carlos

Entre los seguidores de Juan Carlos, destaca especialmente Elena, quien ha demostrado su lealtad hacia su padre a pesar de las afrentas del pasado. Sin embargo, no muestra el mismo perdón hacia su hermano Felipe, a quien acusa de intentar «cargarse» a Juan Carlos mientras trata de salvar la monarquía y sus privilegios.

Elena ha regresado recientemente a Madrid, donde ha retomado sus actividades laborales en la Fundación Mapfre. A pesar de la tensión entre ambas facciones de la Familia Real, Elena ha sido fotografiada sonriendo ampliamente, lo que ha generado especulaciones sobre su actitud desafiante hacia Zarzuela.