El Funicular de Artxanda apuesta por la sostenibilidad en su modernización

El Funicular de Artxanda, con más de 108 años de historia, se embarca en un ambicioso proyecto de modernización para impulsar la sostenibilidad y atraer a más visitantes

Nora Abete, concejala de Movilidad y Sostenibilidad, ha presentado el proyecto que busca renovar las instalaciones, mejorar la eficiencia energética y ofrecer un servicio más atractivo y cómodo para los usuarios.

La última reforma del funicular tuvo lugar en 1983, después de un accidente que obligó a renovar sus instalaciones, vías, vagones y estaciones. Ahora, en 2023, se han realizado importantes cambios que incluyen la instalación de jardineras verticales en el acceso de la plaza del funicular, con más de doce especies de plantas, y la colocación de 220 placas solares sobre la pista de patinaje.

Este proyecto ha sido posible gracias a la recepción de fondos europeos destinados a impulsar el turismo sostenible. Con estos recursos, se llevará a cabo un estudio para determinar las necesidades de modernización de los vagones y, de ser necesario, sustituirlos por otros nuevos más amplios y con mayor espacio para los usuarios y el transporte de bicicletas.

El Ayuntamiento de Bilbao presenta este proyecto con el objetivo de crear una ciudad más sostenible, renovando las instalaciones para ahorrar energía y hacerla más atractiva para superar la cifra del millón de visitas al año. El Funicular de Artxanda es la segunda atracción más visitada de la ciudad, después del Museo Guggenheim Bilbao.

La modernización del funicular no solo busca mejorar su imagen y aumentar la comodidad de los visitantes, sino también reducir su impacto ambiental. Las placas solares y las jardineras verticales son solo el comienzo de un proyecto que se espera siga creciendo en los próximos años.

La incorporación de vagones más amplios y con más espacio para el transporte de bicicletas también tiene como objetivo fomentar la movilidad sostenible entre los ciudadanos y turistas. De esta manera, se espera que el uso de transporte público y bicicletas aumente, reduciendo la congestión vehicular y la contaminación en la ciudad.

Además de las mejoras en las instalaciones y la eficiencia energética, el proyecto también contempla la mejora de la accesibilidad para personas con movilidad reducida. De esta forma, se garantiza que todos los visitantes puedan disfrutar de este emblemático medio de transporte y del hermoso paisaje que ofrece la vista desde Artxanda.

El Funicular de Artxanda es un icono de la ciudad de Bilbao y, con esta modernización, busca mantenerse como un referente de sostenibilidad y atractivo turístico. Esta iniciativa no solo beneficiará al medio ambiente y a los visitantes, sino que también impulsará la economía local y contribuirá a posicionar a Bilbao como una ciudad líder en sostenibilidad.