17 de mayo de 2024 | 5:38

Bizkaia

Puente de Rontegi ejecuta ampliación

María José Gonzalez

19 de enero de 2024 | 8:44 am

La Diputación de Bizkaia ha dado un paso significativo hacia la mejora de la infraestructura vial en la provincia con la aprobación del proyecto de construcción de la segunda fase del intercambiador de Cruces. Este ambicioso proyecto, valorado en casi 12 millones de euros, tiene como objetivo principal desahogar uno de los nudos viarios más transitados del territorio, donde se estima que circulan una media de 250 mil vehículos diarios.

La transformación del puente de Rontegi con más carriles y más fluidez

La intervención en el Puente de Rontegi busca principalmente mejorar la fluidez del tráfico en una de las arterias más importantes del área metropolitana de Bilbao. Actualmente, el puente cuenta con cuatro carriles que se expandirán a cinco, facilitando el tráfico hacia Barakaldo, Bilbao y Santander. Esta reorganización no solo aumentará la capacidad de la vía, sino que también mejorará la seguridad y la experiencia de conducción para miles de usuarios diarios.

Detalles del proyecto

El proyecto incluye la construcción de una nueva estructura en voladizo y la ampliación del viaducto sobre la calle Buen Pastor. Se instalarán dos puentes gemelos e independientes, uno para cada sentido de circulación, acompañados de pantallas acústicas y barreras de contención, para reducir el impacto ambiental y mejorar la seguridad vial.

Las mejoras no se limitan solo a la ampliación de los carriles. El plan contempla también la utilización de materiales y diseños que ofrezcan una óptima reducción de ruido, partículas y suciedad, mostrando un compromiso con el bienestar de los residentes cercanos al puente.

Una primera fase exitosa

La primera fase de la ampliación del intercambiador ya ha demostrado ser un éxito. Inaugurada a finales de noviembre de 2022, esta fase permitió ampliar de tres a cuatro carriles la BI-30 (antigua N-637). Este cambio ha aliviado considerablemente el tráfico y ha mejorado la seguridad vial en un punto crucial que une importantes destinos como Santander, Ezkerraldea y Bilbao.

Esta actuación ha abarcado aproximadamente 1.200 metros de la autopista BI-30, permitiendo una mayor longitud en la convergencia de tráficos y una segregación más eficiente del tráfico proveniente de Cruces y con destino a Barakaldo-Lutxana.

Impacto positivo en la movilidad de Bizkaia

Con un período estimado de 21 meses de obras, se espera que los trabajos de la segunda fase comiencen tras el verano, marcando un nuevo capítulo en la historia de la infraestructura vial de Bizkaia. Esta expansión no solo beneficiará a los conductores locales y regionales, sino que también contribuirá al crecimiento económico y a la calidad de vida en la región.

La inversión de 11.9 millones de euros refleja el compromiso de la Diputación de Bizkaia con proyectos que tienen un impacto significativo en la mejora de la infraestructura y la vida de los ciudadanos. Este proyecto es un claro ejemplo de cómo la planificación urbana y el desarrollo de infraestructura pueden trabajar juntos para crear ciudades más accesibles y seguras.

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